Teresa Portela: “A estos Juegos no me conformo con ir”
Si hay una historia de éxito y longevidad en el olimpismo español femenino por excelencia, esa es la de Teresa Portela. La piragüista ha conseguido grabar su nombre en la embarcación española de K1 200m que llevará España a los Juegos Olímpicos de Tokio, lo que la convertirá a sus 39 años en la deportista nacional con más participaciones olímpicas de la historia: Seis. Ininterrumpidamente desde que debutara con 18 años en Sídney 2000.
La natural de Cangas forma parte del club UCAM Piragüismo, tiene una clínica de fisioterapia junto con su marido en O Grove y estudia el Grado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos en la Universidad Católica.
Van a ser tus sextos Juegos Olímpicos. ¿Qué es lo primero que se te pasa por la cabeza?
Que es algo increíble que jamás había soñado y que eso supone que llevo más de 20 años en la élite. Es un lujo poder seguir disfrutando de mi deporte, que mi carrera deportiva se extienda a lo largo de tantos años y hacer historia en España, que no es nada fácil. Como se suele decir, llegar es difícil... pero mantenerse todavía más.
¿Con qué se conforma Teresa Portela en estos Juegos?
Esta temporada para mí empezaba por afianzar la plaza, que tuviera nombre y apellidos. Y ahora mismo pienso que a estos Juegos, obviamente, no me conformo solo con ir. Ya estuve en cinco y recuerdo que en los primeros de Sídney el ir ya era un regalo, pero eso cambió. Me conformo con poder dar lo mejor de mí, es decir, llegar en mi mejor estado de forma, sin ningún contratiempo, y dar el cien por cien. Estamos todos luchando por ser los mejores y lo que me encantaría es poder estar en otra final olímpica y que ese cien por cien me lleve a estar alto.
¿Te ves en París 2024?
Pues, la fecha está ahí cerca. Para mí la clave es siempre ir objetivo a objetivo y marcarme retos a corto plazo. Ahora queda muy poco para los Juegos de Tokio y marco otra vez mi objetivo, después ya se verá. Pero, es verdad que a día de hoy no me planteo mi retirada porque mientras me sienta bien, en forma física y mentalmente y tenga motivación para seguir cada día, seguiré. Nada me parece imposible actualmente. 2024 está ahí y no lo descarto.
Tras más de 20 años al máximo nivel competitivo, ¿cuál dirías que es el secreto para mantener la motivación?
El secreto es trabajo y trabajo, no hay otro. Creo que las claves son que te tiene que gustar lo que haces y buscar aspiraciones que sean realistas a la vez que ambiciosas. Que se pueda alcanzar aunque sea difícil. Pienso que no hay que plantear más allá que pequeños objetivos a corto plazo en cualquier ámbito de la vida y al final, cuando te das cuenta, el tiempo pasa y, ya ves, en mi caso han sido 20 años. Si hay trabajo llegan los resultados y, gracias a Dios, siempre tuve esa recompensa del trabajo diario.
¿Qué ha cambiado entre la Teresa que debutó en Sídney y la de hoy día?
Me veo mucho más preparada deportivamente, me siento con más experiencia y seguridad en mi misma. Son muchas paladas y kilómetros encima pero lo que no ha cambiado es la ilusión. El hecho de vivir mis sextos Juegos no significa que me acomode porque ya viví cinco, estoy igual de motivada y contenta que para los primeros. Me siento como cuando tenía 18 años.
¿Qué desafíos te esperan de aquí a Tokio?
La siguiente competición va a ser una Copa del Mundo que se celebra en mayo. Todos los años voy a una regata internacional porque viene bien verse con las rivales a enfrentar en los Juegos Olímpicos o en mundiales. De modo que ahí estaré para ver cómo voy, ver detalles, ver donde puedo mejorar y cómo me encuentro.
¿Cómo eres capaz de compaginar ser deportista al más alto nivel con tu centro de fisioterapia y tus estudios?
Es difícil compaginar todo eso y también con el aspecto familiar y mi hija, Naira. Sin embargo, pienso que todo es fundamental y con respecto a mis estudios en la UCAM estoy supercontenta porque lo voy haciendo poco a poco y es algo que me encanta. El hecho de que pueda tener estos conocimientos sobre la alimentación es fundamental tanto para mi trabajo, mi vida cotidiana y el día a día de cara a mi hija. Recomiendo a todo deportista que intente compaginar su carrera con los estudios. Si no terminas un máster en dos años, pues que sea en tres o en cuatro, pero la seguridad de tener una formación es indispensable. Al final es todo cuestión de organizarse y yo estoy muy agradecida a la UCAM como mi club y como el lugar donde tengo mis estudios.